Día Mundial del SIDA (Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida).
Dra. Juana Guadalupe Ibarra Hernández.
El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) es un retrovirus que ataca al sistema inmunitario de los seres humanos el cual se encarga de defender a nuestro organismo de infecciones y otras enfermedades. Cuando el VIH ataca nuestro sistema inmune lo va “destruyendo” principalmente unas células conocidas como linfocitos CD4, provocando que pierda su capacidad para combatir enfermedades oportunistas, es decir patologías que estando sanos no causarían tanto daño o serían fácil de erradicar. Cuando esto ocurre decimos que las personas tienen inmunodeficiencia, es decir tienen su sistema inmune vulnerable.
Síntomas:
Los signos y síntomas que se pueden presentar tras contraer la infección van a variar dependiendo de la fase en la que se encuentre. Conforme la infección debilita el sistema inmunitario se pueden presentar síntomas que van desde la pérdida de peso, fiebre o diarrea hasta aparecer en enfermedades graves como meningitis criptológica, tuberculosis o cáncer como linfomas o sarcoma de Kaposi.
La evolución de la infección por el Virus de la Inmunodeficiencia Humana ocurre de manera progresiva en 3 fases:
Fase 1: Infección aguda por el VIH.
- Es la primera fase la infección, se puede manifestar en un periodo de 2 a 4 semanas.
- Síntomas: Similares a los que puede dar la influenza (fiebre, cefalea o dolor de cabeza, dolor de garganta) e incluso erupción cutánea. Sin embargo, también puede ser que no se presente ningún síntoma.
- En esta fase el VIH se reproduce rápidamente y se propaga por todo el cuerpo, lo que provoca que se aumente su capacidad de contagio.
Fase 2: Infección crónica por el VIH.
- La fase de infección crónica por el VIH también se llama fase de infección asintomática o de latencia clínica.
- Durante esta etapa el virus sigue reproduciéndose, aunque a niveles bajos continúa siendo transmisible.
- Durante esta fase las personas podrían no presentar ningún síntoma ni sentirse enfermas. Esta etapa puede durar 10 años o más aun sin tomar medicamentos para el VIH, pero en algunas personas puede progresar más rápido.
- Si no se recibe tratamiento para el VIH, el virus se va reproduciendo y aumentando en gran medida su concentración en la sangre a lo que llamamos “carga viral”, mientras por otro lado las células CD4 (encargadas de combatir las enfermedades como infecciones o cáncer) van disminuyendo, lo que nos llevará a la 3 fase, el Síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA).
Fase 3: Síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA).
- Es la etapa final y más grave de la infección por el Virus de Inmunodeficiencia Humana.
- En esta etapa el sistema inmunitario esta tan lastimado que el cuerpo no logra luchar contra infecciones oportunistas o el cáncer provocando que las enfermedades sean más graves.
- El diagnóstico de SIDA se realiza cuando se tiene un recuento de células CD4 menor a 200/mm3 o cuando comienzan a presentar estas infecciones oportunistas.
- En esta fase las personas cuentan con una carga viral muy elevada los que las hace más propensas a contagiar el virus.
- Sin no se recibe tratamiento la sobrevivencia es aproximadamente de 3 años.
¿Cómo se transmite el VIH?
Se transmite mediante el intercambio de líquidos corporales como sangre, semen, secreciones vaginales o rectales, la leche materna o durante el parto. Es importante recordar que la transmisión solo se dará cuando estos fluidos entren en contacto con una membrana mucosa, tejido lesionado o son inyectados directamente en el torrente sanguíneo mediante agujas o equipo punzocortante.
Es importante quitar de nuestras creencias que se transmite a través de besos, abrazos o apretones de manos.
Prevención:
Evitar conductas que nos pongan en riesgo permitirá que evitemos infectarnos o bien detectar oportunamente la enfermedad.
- Utilizar preservativo o condón, como comentamos la vía de transmisión se puede dar al tener relaciones sexuales vía vaginal o anal, es importante aprender a utilizar correctamente el preservativo.
- Evite prácticas de riesgo: limite el número de parejas sexuales, ya que si usted tiene un mayor número de parejas sexuales el riesgo de contraer VIH aumenta.
- No comparta agujas y asegure que el equipo de inyección sea esterilizado.
- Realícese pruebas para detectar Enfermedades de Transmisión sexual, ya que estas incrementan el riesgo de infección por VIH.
- Control durante el embarazo: lleve un adecuado control médico, esto le permitirá asegurar una evolución integra, ya que durante este periodo se realizan pruebas de VIH para una detección oportuna.
Diagnóstico:
El diagnóstico se puede realizar utilizando pruebas rápidas, que incluso dan el resultado el mismo día:
- Prueba de antígenos y anticuerpos:
Los antígenos son sustancias del propio virus del VIH y al ser encontradas en la sangre nos darán un diagnóstico positivo. Los resultados podrán verse reflejados a las pocas semanas de la exposición al virus.
Los anticuerpos por otra parte son producto del sistema inmunitario al tener contacto con el VIH, estos logran detectarse en semanas e incluso meses. - Análisis de anticuerpos:
Esta prueba busca de manera intencional los anticuerpos producidos por el sistema inmunitario, se puede realizar utilizando muestra de sangre o saliva y tardan de tres a doce semanas después de la exposición para lograr un diagnóstico positivo. - Pruebas de ácido nucleico:
Es la primera prueba que puede dar positivo, ya que busca el virus en la sangre, es la prueba mas recomendable en caso de que durante las últimas semanas se haya estado expuesto a algun riesgo.
Es importante mencionar que las pruebas de laboratorio existen pruebas que se realizan con técnica ELISA (Enzimo inmunoanálisis de adsorción) y pruebas mediante la técnica PCR ( Reacción en cadena de la polimerasa) en la cuales la sensibilidad y especificidad varían por lo que recomendamos que ante un resultado de una prueba acuda con su médico para la interpretación correcta de los resultados.
Tratamiento:
Si bien no hay cura para la infección de VIH, existen medicamentos conocidos como antirretrovirales, que permiten inhibir la reproducción del virus lo que retrasa su replicación en el cuerpo permitiendo que el sistema inmune conserve sus células CD4 sin llegar a la fase 3 o desarrollo del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA).
De acuerdo con cifras emitidas por la Organización Mundial de la Salud: “Se calcula que a finales de 2020 había 37,7 millones de personas que vivían con el VIH, más de dos tercios (25,4 millones) en la Región de África de la OMS. Ese mismo año, 680 000 de personas murieron por causas relacionadas con el VIH y 1,5 millones de personas resultaron infectadas por el virus”.
Como podemos ver el VIH es un problema de salud pública que ha cobrado la vida de más de 35 millones de personas desde que se declararon los primeros casos. Es preocupante que existiendo tratamientos que pueden ayudar a que las personas lleven una vida con calidad no tengan acceso a estos por infinidad de barreras. Es por esto por lo que cada 1 de diciembre se conmemora el “Día mundial del SIDA”, una fecha para recordar a la sociedad que este virus existe, y que nosotros como sociedad pongamos fin a al estigma y discriminación económica, social y cultural de quien la padece. Este año el Lema es: “Poner fin a las desigualdades. Poner fin al sida. Poner fin a las pandemias”, actualmente la pandemia por el virus del COVID-19 a absorbido nuestra atención al 100%, pero no olvidemos que existen otras pandemias que enfrentar.
Es momento de tomar el compromiso personal y apoyar a que esta enfermedad se erradique, la prevención, diagnostico oportuno, tratamiento y reducción de las desigualdades está en nuestras manos.